Vacíos emocionales generados por las redes sociales
El acceso constante a la vida ajena en redes sociales ha traído consigo un fenómeno preocupante: el vacío emocional. A medida que navegamos por un mar de imágenes perfectamente curadas y publicaciones llenas de éxitos, es fácil caer en la trampa de las comparaciones constantes y sentir que nuestras propias vidas son menos emocionantes o satisfactorias, por eso quiero hablar de vacíos emocionales generados por las redes sociales.
Este contraste puede generar un vacío emocional, una sensación de insatisfacción y carencia que se profundiza con cada desplazamiento hacia abajo en nuestros feeds.
Las redes sociales, diseñadas para conectar, a menudo terminan creando una desconexión interna. La búsqueda de aprobación a través de ‘me gusta’ y comentarios puede convertirse en una necesidad insaciable que alimenta la inseguridad y la baja autoestima.
En lugar de llenar nuestros vacíos emocionales, las redes sociales a menudo los amplifican, dejándonos con una sensación de vacío aún mayor.
Explorar cómo y por qué las redes sociales contribuyen a estos vacíos emocionales es crucial para entender los impactos psicológicos de nuestra vida digital y encontrar formas de usar estas plataformas de manera más saludable y consciente.
Me he motivado a crear un artículo como este porque a mi parecer las redes sociales pueden ser de gran ayuda, pero por otro lado tristemente el lado oscuro es bastante oscuro. Actualmente hay más demanda de psicología por muchas razones que tienen que ver con redes sociales. Además, para complementar les recomendaré ver una película.
Emprender en la mayor empresa del mundo:
Nosotros mismos, si, somos una empresa valiosa y en nuestro camino vamos aprendiendo sobre nuestras creencias y cómo nos afecta. En este punto es vital adentrarnos en hablar de vacíos emocionales generados por las redes sociales.
Falta de amor propio:
Ese estado de vacío emocional en el que alimentamos una imagen negativa de nosotros mismos, y por ende una baja autoestima que aumenta nuestra sensación de vacío. En las redes sociales es común observar la vida idealizada de otros, lo que tienen, como lucen…Esto afecta a unos cuantos, el control lo tienes tú.
Ausencia de relaciones significativas:
Nuestras vidas llenas de ocupaciones y actividades también traen el aislamiento, lo que fortalece ese sentimiento de soledad, y falta de conexión con seres amados y amistades que nos motivan; los conflictos familiares y de pareja agudizan esta sensación de vacío. ¿Cómo crees que esto se refleja en redes sociales? Quizás para algunos les caería bien presenciar experiencias con amigos reales en persona (siempre y cuando se pueda) que solo mandar mensajes y/o videos por redes.
Desconexión con las propias emociones:
No estamos acostumbrados a identificar nuestras emociones, muchas veces no las expresamos por temor a ser juzgados o rechazados al no poder gestionar nuestras emociones ese vacío aumenta, dando paso a la apatía.
Tal vez estás sintiendo algunas emociones a causa de estar en redes sociales constantemente y no te has dado cuenta, siendo así no gestionas nada porque aún no eres consciente. Pero una vez lo eres, puedes hacer “algo”.
Búsqueda infructuosa de la felicidad en elementos externos:
Solemos tener la concepción mental de que la felicidad se encuentra fuera de nosotros, el éxito académico, profesional, material, esa búsqueda de sentir que te aprueban socialmente, aun así, si eres aceptado y aprobado ese vacío persiste.
Esto sí que he visto mucho reflejarse en redes, las personas buscan ser populares, volverse famosos, ser influencers, no aplica para todos, pero bueno…Si para muchos. Quieren llenarse de likes y comentarios, quieren hacerse viral como sea, buscan ese reconocimiento en sus seguidores. ¿Si lo has notado alguna vez?
¿Cómo ayudarnos a salir del vacío emocional?
Hasta aquí, hemos explorado muy someramente lo que se siente cuando tenemos un vacío emocional, pero… ¿Cómo podemos salir de esa situación? Todo, en principio, requiere de tiempo para escucharnos, buscar ayuda, salir de nuestra área de confort.
Buscar ayuda:
Buscar ayuda psicológica, no es porque seamos enfermos mentales, realmente es un gran acto de amor por nosotros mismos, un profesional que tiene las herramientas para orientarnos y acompañarnos en el proceso de aprender a conocer, identificar y gestionar nuestras emociones y el diálogo interno que puede ser tan nocivo para nuestra auto imagen.
Aprender a amarnos:
El amor por nosotros mismos es maravilloso porque nos hace mejores, si nos tratamos amorosamente, nuestro mundo se llena de amor, y aprendemos a relacionarnos con nuestro entorno con amor, cambia todo para bien.
Valorar y priorizar las relaciones importantes:
Conectar con esos amigos que nos alegran, o con la familia que nos apoyen y nos den comprensión, nuestra pareja (En caso de tenerla) es el ser más cercano e importante, es el inicio en nuestra red de apoyo, cada uno de esos seres vitamina que nos ayudan a sentirnos acompañados y forman parte de la red de seguridad en la cual podemos apoyarnos.
Gestionar nuestras emociones:
Poder gestionar nuestras emociones implica sentirse, saber qué es eso que sientes, y como lo expresas constructivamente, en lo personal creo firmemente en el poder de la escritura para gestionar mis emociones, me ayuda a identificar esas emociones, comprenderme y tenerme amorosa paciencia.
Una pequeña reflexión diaria en la mañana para direccionar nuestro día es motivador, y en las noches para evaluar el día y como nos sentimos es un acto de amor importante (te invito a nuestro curso de redes sociales y el método bullet journal que puede ayudarte mucho), este ejercicio no lleva más de 15 minutos al día.
Vivir con un propósito de vida:
Tener una dirección en la vida nos proporciona un blindaje importante, encontrar ese sentido y vivir nuestra vida con un propósito nos conecta con el positivismo, entusiasmo y nos provee de la gasolina de la automotivación.
Realiza actividades que te brinden un estado de bienestar:
Debes dedicar tiempo a practicar actividades que te den satisfacción y que aumenten tu sensación de bienestar, ya sea que te guste ejercitarse, o leer, o caminar por la naturaleza, practicar yoga, dibujar y pintar mándalas, jugar ajedrez, no importa cuál sea esa actividad que te gustaría o te gusta realizar, dedícale tiempo, seguro que te dará mucha satisfacción personal.
Rodearte de personas positivas:
Bien dice el refrán: ¡El que anda con lobos a aullar aprende! Es por eso que pasar el tiempo con todas tus personas vitamina, ayudarán aún más con tu estado de bienestar y satisfacción.
Controla el consumo de redes sociales:
Pon atención, ¿cuánto tiempo pasas en Instagram? ¿Qué sientes después de soltar el móvil? Analiza tus emociones, y sobre todo qué ves. Sigue cuentas que te aporten. Es muy fácil estar frente a la pantalla bajo el control de la dopamina barata. Ayúdate un poco.
El viaje de Telma la Unicornio: del Vacío Emocional a la Plenitud del Ser.
Quiero conversar con ustedes de un tema que me puso a reflexionar… En familia solemos disfrutar de tardes de películas en casa algunos fines de semana y vimos una película animada denominada: Telma La Unicornio. Tengo la convicción que el formato de dibujo animado no siempre es para niños, hay muchas películas en ese formato que nos llaman a la reflexión, como es el caso de Telma la Unicornio…Por cierto: ¡Si no han visto la película, no lean más de este párrafo!¡Contiene spoilers!.
Ya hechas las advertencias, iniciamos: Telma, es un joven poni con una voz muy hermosa y su sueño es convertirse en una reconocida cantante junto a sus amigos Otis y Reggie que integran su banda musical. Sin embargo, sus aspiraciones se ven opacadas por su apariencia física, lo que les impide obtener una oportunidad en el competitivo mundo de la música.
Un inesperado baño de pintura, escarcha (purpurina o brillantina) y una zanahoria, transforma la vida de Telma de manera radical. Tras este incidente, adquiere la apariencia de un unicornio, lo que la convierte en el centro de la atención en las redes sociales. Convertirse en una celebridad virtual le abre las puertas a la fama y la oportunidad de mostrar su talento musical al mundo.
Tristemente, Telma pronto descubre que el camino hacia el éxito no siempre es el más sencillo ni el más gratificante. La fama repentina y la superficialidad del mundo virtual la alejan de su esencia y de sus verdaderos amigos. En este punto comienza un viaje de aprendizaje para nuestra querida poni.
Es que me invitó a la reflexión, el camino al éxito, el buen éxito, ese que lleva a la plenitud del ser, no importando lo que sea el éxito para ti, va a requerir de un esfuerzo, superar muchos temas en nuestro camino de evolución, uno de ellos el vacío emocional.
Investigando en internet me topé con el libro de la psicóloga Adriana Waisman: Vacío Emocional, el Encuentro con Uno Mismo y la Búsqueda del Bienestar, en él la autora -al referirse al vacío emocional- nos dice: “…Es esa rara sensación que se puede definir con una mezcla de tristeza, ansiedad y miedo, que puede llegar a la desesperación, la sentimos como un agujero o hueco negro que atraviesa el estómago, otras veces el corazón y la garganta, no importa donde se sienta, duele física y emocionalmente, muchas veces envuelto en un laberinto de emociones inmanejables. Buscamos refugio comprando o comiendo de manera compulsiva o creando vínculos dependientes…”
Más adelante la autora nos dice: “…la sensación de vacío es una experiencia frecuente que tiene que ver con nuestras creencias llenas de: “no puedo”,” tengo que” y “nunca” pocas veces de “necesito” y “quiero”, magnificar defectos y errores, anticiparse a un futuro negativo, etiquetarse y buscar la perfección, llevan a tener una autovaloración negativa…”
El buen éxito va requerir un esfuerzo mayúsculo de aprendizaje, mejora y evolución personal, seguro te has topado tanto en redes como en la vida diaria con personas (y nosotros mismos) llenando esos “vacíos” con comida de manera compulsiva, con ropa de marcas reconocidas, accesorios de moda, de acuerdo con el poder adquisitivo puede ser vehículos de alta cilindrada, propiedades, en todos los niveles económicos se pueden ver estos vacíos a veces disimulados detrás del éxito material, la pareja perfecta ante la sociedad, o en algunos casos en esos kilos de más que no podemos desaparecer.
Volviendo a nuestra querida Telma, y su viaje al descubrimiento de su valor como ser maravilloso, talentoso y aprendiendo que su felicidad no está en la apariencia física ni en la aprobación de las demás personas; descubre su autenticidad el valor de la amistad sincera y el propósito de su vida que la lleva a explorar su talentosa voz con perseverancia y pasión.
¿Has sentido vacío emocional por redes sociales?
Este artículo es creado con cariño para quizás hacerte consciente. Me parece que es importante hablar de este tema, es vital, las redes sociales también están causando mucho daño. Pero mucho, eso me entristece. Creo en una humanidad con potencial, pero algo está mal.
El conocimiento es poder, aprovechemos las redes para el bien, y tengamos control sobre el consumo que hacemos, si somos personas adultas y nos afecta en algún momento de nuestras vidas, ¿qué será de las nuevas generaciones? Sinceramente me preocupa. Puedes ver también: Cómo superar la adicción tecnológica, en especial las redes sociales.
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